La Version Celestial y la Satánica de Ubuntu!

Ubuntu hay para todos los gus­tos. Si señor, el prob­lema no es si te gusta Gnome o KDE, o si eres rojo rojito o azul azulito, nada que ver… el dilema es: ¿estás con Dios o con el Dia­blo? Y Ubuntu tiene la mejor opción para ti, o al menos te per­mite per­son­alizar la dis­tro de acuerdo a tus gus­tos más… ¿religiosos?

Ahora disponemos de Ubuntu Chris­t­ian Edi­tion y Ubuntu Satanic Edition.

Ubuntu Chris­t­ian Edi­tion es como la dis­tribu­ción ‘nor­mal’ de Ubuntu, a excep­ción que viene con una pan­talla splash espe­cial para iden­ti­ficar a esta dis­tro, y además incluye soft­ware que los cris­tianos quer­rían usar, como fil­tros web para el con­trol de padres y con­tenidos inapropi­a­dos, un pro­grama para el estu­dio de la Bib­lia y un script que provee diari­a­mente un verso de la Biblia.

Por otro lado, Ubuntu Satanic Edi­tion no es una dis­tro en real­i­dad, sino un con­junto de paque­tes que per­miten ade­cuar tu entorno de escrito­rio por un ambi­ente más ‘infer­nal’. Apare­ció pocos días antes de Navi­dad, tal vez para hacer burla de la edi­ción cris­tiana de Ubuntu. Lo cierto es que desde las pági­nas prin­ci­pales de ambas edi­ciones, tienes las instruc­ciones para actu­alizar tu sis­tema. Curiosi­dades del mundo de Ubuntu.

Para aque­l­los que les resul­tan demasi­ado angel­i­cales las ver­siones ofi­ciales que Ubuntu, y que se echaron las manos a la cabeza al encon­trar Ubuntu Chris­t­ian Edi­tion, ha lle­gado al rescate la Ubuntu Satanic Edi­tion. No te pre­ocu­pes, con esta edi­ción ten­drás ase­gu­rado tu pase al infierno en primera clase, y si encima lo mez­clas con el efecto lla­mas de Beryl…

Esta ver­sión se com­pone úni­ca­mente de tres paque­tes que con­tienen difer­entes tra­ba­jos grá­fi­cos, para cam­biar la apari­en­cia de tu escrito­rio. Por ahora, puedes pro­bar var­ios fon­dos de pan­talla, una pan­talla de entrada y una pan­talla de bien­venida de Gnome. En su sitio web podréis encon­trar las sen­cil­las instruc­ciones para su insta­lación y configuración.

Fuente: Ubun­tuce y Ubun­tusa­tanic